L'Art dels Velluters...

Este pasado verano, me acerque con mi madre al antiguo Convento del Carmen en Valencia, ahora reconvertido en museo, para ver una exposición que se me antojó curiosa: L'art del velluters (El arte de los sederos).

A las que seáis de por aquí no hace falta que os cuente lo que supuso el arte de los sederos aquí y como está ligado a nuestra historia e indumentaria (de hecho, mi edificio gótico favorito es La Lonja de la Seda...), y a las que seáis de fuera, podéis preguntarme lo que queráis, que si lo se os lo contaré encantada pero la entrada sería interminable si me pusiese a contaroslo todo en esta entrada...

Bueno, retomando el tema inicial, esta exposición me interesaba especialmente porque recogía piezas que difícilmente podríamos volver a ver de no viajar a su sede original en la Hispanic Society of America de Nueva York. A raíz de la exposición de los cuadros del genial Sorolla que nos "prestaron" se ha mantenido la relación con esta institución cultural americana y decidieron que después de su restauración en el Instituto Valenciano de Conservación y Restauración, las piezas podían permanecer algo mas de tiempo para su exposición conjunta con otras que pertenecen a museos y fundaciones españolas e italianas y que en mucho casos tenían su origen en las sederías valencianas. 

La intención inicial de la exposición era mostrar las diferencias que podían caracterizar y diferenciar los distintos orígenes y manufactura de las piezas, pero por lo visto, y dado que en la Europa del siglo XV, los pioneros en esta materia, Italia, que tenia importantes centros sederos en Como, Lucca y Florencia, y cuyo comercio con China a través de Venecia ya controlaba desde el siglo XIII, y Valencia, mantenían unas estrechas relaciones artísticas, culturales y comerciales fomentadas desde el vaticano por los dos papas valencianos, Calixto III y Alejandro VI, no han logrado llegar a ninguna conclusión. Fueron tejedores genoveses los primeros en establecerse en Valencia, trayendo con ellos telares y técnicas, que fueron asimilados a los que ya existían en la ciudad desde la época de dominación islámica. 

Lo primero antes de poner las fotos que hice es disculparme por lo pésimas que son algunas y la poca luz que tienen pero estaba prohibido usar cámaras con flash y la iluminación de las salas era muy baja para evitar dañar los tejidos.

Estas primeras fotos son de un precioso (y fresquisimo!!) jardincillo que aun se mantiene en uno de los dos claustro principales.  

Solo hice algunas para poder enseñaros las puntadas tan perfectas y pequeñas que tienen los bordados... 

En la primera foto se ven algunos de los colores que se obtenían tiñendo la seda cruda con los tintes vegetales de la época. La curiosa caja de la segunda foto es un juego de pesas y la tercera muestra carretes y madejas de seda, husos y lanzaderas que aun se conservan. La que se ve peor, es un incunable en el que se recogen técnicas, usos, recetas para tintes, normas del gremio...

Solo fotografié las piezas que me llamaron mas la atención por los bordados. Muchas de las piezas eran brocados y casullas. 
Pese a la escasa luz y la pésima cámara de mi móvil en estas fotos aún es posible ver el matizado de hilos y como con tan poco colorido del disponían por las propias limitaciones técnicas de la época lograban bordar con tanto realismo y tan perfectamente los pliegues de los mantos y ropajes. Además, me sorprendió especialmente ver los "abalorios" ya incluidos en estos trabajos. 
He visto otras exposiciones en las que se contaban ropajes ceremoniales religiosos o trajes de época de nobles y siempre aparecen piezas en las que hay pequeñas perlas, cristales o gemas semipreciosas cosidas en pliegues, mangas y escotes o incluso a modo de botones, pero estas "perlillas" eran prácticamente como los abalorios actuales en cuanto a tamaño y forma...    

Bueno, espero que os haya gustado, no haya sido demasiado "ladrillo" y os motive a acercaros a alguna exposición de este tipo. Las de "La luz de las Imagenes", aunque no son específicas sobre telas o bordados, cuentan con piezas inmejorables y suelen estar conservadas maravillosamente.



PS: Si "clickais" en cualquiera de las fotos, debería de poder verse mejor.